El jefe de servicio de Agricultura, Ganadería e Industrias Agroalimentarias de la Delegación Territorial de Agricultura en Jaén, recibe la distinción durante el acto de la celebración del Día de la Guardia Civil.
Si el semblante de un hombre refleja su espíritu, ningún adjetivo resulta más conveniente para definir la personalidad de D. Celedonio Fornell que la templanza. Y es que, en tiempos donde en todos los ámbitos rige la polémica de forma sumaria, es similar a encontrar un mirlo blanco, tenemos la fortuna de contar con la labor profesional de un perfil tan puro como el de Fornell.
Veterinario por vocación, gracias al amor que sentía por el campo en la niñez, cuando disfrutaba de la tierra de Arquillos acompañando a su abuelo. Tras licenciarse en veterinaria, se incorporó prontamente a la administración pública, como Jefe de Sección de Sanidad Animal, respondiendo así a su proclividad por el servicio público. Durante esta etapa inicial se licenció en Derecho, entendiendo de la necesidad de conocer las normas, para saber aplicarlas con acierto desde la Administración.
38 años ejerciendo la profesión, 21 de ellos como jefe de servicio de Agricultura, Ganadería e Industrias Agroalimentarias de la Delegación Territorial de Agricultura en Jaén, compaginando, además, las actividades propias de la presidencia de la Comisión Deontológica y la secretaría de la Comisión de Espectáculos Taurinos del Ilustre Colegio Oficial de Veterinarios de Jaén, y las que le son asignadas como miembro de la Comisión de Agricultura del Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Veterinarios.
Respecto a la Administración, y tras su larga trayectoria, considera que, tras la reestructuración del ente público, la figura del veterinario está mejor valorada, y más reconocida, habiendo alcanzado la profesión, el respeto de la propia Administración. “Muchas veces a los que estamos en el despacho se nos olvida a quién tenemos que servir, que es al ganadero; y en este sentido nos falta empatía con su figura”, declara Fornell, respecto a las asignaturas pendientes de la Administración Pública.
Es evidente que, para alcanzar tal desempeño, resulta indispensable contar con una buena dosis de empatía, alto valor de la justicia, y una inmensa capacidad de trabajo; algo que resulta fácil de leer y difícil de aplicar en el día a día.
Siendo de esta forma, no es de extrañar que el pasado día 12 de octubre, en el que se llevan a cabo los actos conmemorativos de la Guardia Civil y el Día de la Hispanidad, el subdelegado del Gobierno de España en Jaén, Manuel Fernández, impusiera la condecoración de la Cruz del Mérito de la Guardia Civil, por sus méritos y servicios, a D. Celedonio Fornell.“Sentí alegría y orgullo, pero no solo personalmente, sino como cabeza de un equipo de gente sin el cual, sería imposible realizar el trabajo”, comenta Celedonio con respecto a la llamada del capitán de la Policía Judicial, D. Guillermo Argal, quien le anunciaba que había sido designado para recibir la condecoración.
Manuel Fernández imponiendo la medalla de la Cruz del Mérito
Esta distinción, tal y como reconocía con sus propias palabras el subdelegado, D. Manuel Fernández, se entrega a “aquellas personas que son la personificación de los mejores valores que le son propios al Instituto Armado; son ejemplos y contribuyen a proteger los valores y derechos humanos que construyen nuestra convivencia democrática y pacífica”.
Con la imposición de la Cruz con distintivo Blanco, propia del personal no perteneciente al Cuerpo, Fornell ingresa de forma oficial en la Orden del Mérito de la Guardia Civil, lo que supone un honor dado los valores humanos que tal ingreso requieren.
Manuel Fernández, Francisco José Lozano y Celedonio Fornell tras la imposición de la Cruz del Mérito
La humildad con la que el colegiado veterinario ha recibido las felicitaciones del colectivo veterinario, no son sino una muestra más de lo realmente merecido que resulta este reconocimiento y es que, cuanto más grande es el talento, menos espacio puede ocupar el ego; y esto se cumple íntegramente en la persona de Celedonio quien, durante la entrevista, no puede evitar emocionarse al responder a la pregunta sobre qué sintió al recibir la distinción: “Me acordé de mi familia; de mis padres, mis hermanos, mi mujer… de los sacrificios de todos ellos, y del trabajo de mis compañeros veterinarios, directores de OCA… fue muy emocionante”.
Por último, respecto a su deseo futuro para la veterinaria, Celedonio transmitió “la necesidad de que la profesión, siga por el camino que va, poco a poco nos hacemos nuestro sitio, a través de nuestro trabajo diario, y a esa entrega necesaria desde el primer día de ejercicio”.
Ni que decir tiene que este logro personal de Fornell, supone un tremendo orgullo para la Junta de Gobierno del ICOV Jaén, quienes desean transmitir de forma pública su expresa felicitación al colegiado, así como la satisfacción que siente este ente, al contar con la labor de tan magnifico profesional.
Celedonio Fornell acompañado de su mujer, María, Catalina Madueño y los veterinarios Manuel Díaz-Meco, Cristobalina Torralba y Claudio Izaga, posando tras la celebración del acto por el Día de la Guardia Civil.
Sin duda, este éxito en la carrera profesional de Celedonio Fornell, supone un orgullo para la profesión veterinaria en Jaén que, cuenta con verdaderos titanes veterinarios y, más importante aún, con hombres y mujeres de valores superiores, puestos al servicio de la veterinaria.